Mamá sopló las velitas esperando que se me fuera la tos y la laringitis, que a Feli no le volviera la otitis y que podamos finalmente guardar el nebulizador para no usarlo nunca más. Según tengo entendido, éste deseo se repite año tras año y yo no iba a ser la excepción. No ma, cuando llega el invierno hay que dejar a mano sweaters, poleras y nebulizadores. Es una muy buena idea regalarle para su cumple una buena dosis de solución fisiológica. Puede ser un regalo muy original para el año que viene. Ténganlo en cuenta.
¡Feliz cumple mami!
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