Pero cuánta casualidad, che!!

Resulta que estábamos en los jueguitos con mis abuelos. Específicamente yo estaba arriba de un Ben10 giratorio junto con papá, mamá sacaba fotos, abu Kuki cuidaba a Cata en el cochecito y abu Tito me gritaba desde abajo. OK, esta era la escena (bastante típica por cierto).

Caos de gente a más no poder. Gritos. Gente. Y más gente. Parece que todos decidimos ir a jugar aprovechando el finde XL.

Entre toma y toma fotográfica, mamá miró para el costado. Le pareció ver a alguien conocido... no, no puede ser pensó... volvió a mirar y sí! Era mi amigo uruguayo Alessio con sus papás! en viaje relámpago a Buenos Aires... no lo veíamos desde la playa ya que ellos se volvieron a Montevideo donde viven, y el sábado, de buenas a primeras, me lo vengo a encontrar intentado encontrar un lugar en el Ben10 giratorio (no lo culpo, es lo más).

Cuestión que luego de tomar una merienda rica con mis abuelos, quedamos en comer a la noche con ellos. Jugamos un montonazo y no nos peleamos ni un poquito. Toda una muestra de madurez de nuestra parte, no creen? Y nuestros papás, charlaron de lo lindo.

Hermoso encuentro, muy linda casualidad. Lástima que no estaba mi amigo Toto para acompañarnos porque como era finde largo se fueron a la costa.

Esperamos repetirlo. ¡Ojalá nos veamos pronto todos!