Jose colaboró haciendo la torta y la decoración (fíjense que la A es de Abu, la L es de Lolo y la F de Fede, es decir, los tres cumpleañeros).
Mateo se convirtió en Figuretti apareciendo en todas las fotos del cumple.
Y Toto me hizo el aguante cuando me agarró el malhumor jugando a la pelota conmigo un rato largo.
Lindo día pasamos: al sol, asadito, pocas nubes y soplando velitas. Un lujo.
P.D: En otro post les voy a mostrar cómo soplo. Parece que de tantos cumples que tuve, ya me volví un crack del soplido. Será por eso o porque diariamente debo lidiar con la comida extra caliente de mamá???? Espero por el bien de la punta de mi lengua que empiece a acordarse de las cosas que deja en el fuego o que aprenda de una vez a programar el tiempo en el microondas.